octubre 31, 2009

Charles Addams

Charles Samuel Addams nació el 7 de enero de 1912 en Westfield, Nueva Jersey.
Comenzó sus colaboraciones para The New Yorker en 1933 y pronto se convirtió en uno de los dibujantes mas populares de la revista caracterizándose por sus clásicas “one-liner”, esas viñetas acompañadas de una única línea de texto debajo.
Addams, que realizó más de 1.300 dibujos en el transcurso de su vida y trabajó en The New Yorker hasta su muerte en 1988, también publicó en Collier’s Weekly y TV Guide entre otras y realizó portadas de libros, calendarios, discos e incluso carteles de cine. El más conocido es el de la genial “Murder by Death, escrita por Neil Simon y en cuyos créditos iniciales, diseñados por Wayne Fitzgerald podemos disfrutar de los dibujos de Addams.

Su máxima creación vería la luz a fines de la década del 30 en una serié de situaciones humorísticas protagonizadas por una macabra familia, este primer intento sería fruto de la colaboración junto a su amigo Ray Bradbury que también publicaba en el semanario newyorkino. Posteriormente cada uno crearía su propia version de esta particular familia, la de Brádbury se llamaría The Elliott family y la da Addams, como no podía ser de otra manera, The Addams family.
Estos inspirarían la creación de dos series de televisión en los 60, varias series de dibujos animados y tres largometrajes.

Los que lo conocieron en vida destacan que Charles Addams era una persona muy simpática y agradable pero que disfrutaba mucho de los aspectos macabros de la vida. Tanto es así que él y su tercera esposa Marilyn Matthews Miller se casaron en un cementerio de mascotas o que su casa natal era una terrorífica edificación victoriana de tres plantas ubicada en Elm Street. Cuenta la leyenda que el hogar de Charles Adams fué la inspiración para el hogar de otra familia disfuncional de la ficción. La casa de Norman Bates y su madre en "Psicosis" de Alfred Hitchcock.

octubre 21, 2009

Al Columbia


Al Columbia
¿Quién? Preguntarán muchos.
Un tipo increíblemente talentoso pero que empezó en el mundo del comic con el pié izquierdo.
No se porqué lo emparentó un poco con Paul Pope. Quizás por esa actitud rockera con la que parecen desenvolverse en la vida. Esa desfachatez a la hora de codearse con los grandes. Bueno..., Al Columbia hizo un poco más que codearse con los grandes...
Todo arranca cuando Bill Sienkiewicz abandona "Big Numbers" de Alan Moore en el tercer número y Kevin Eastman, co creador de las Tortugas Ninjas y jefe de la editorial "Tundra" le encarga a Columbia, ayudante de Sienkiewicz hasta ese momento, hacerse cargo del resto de la obra. Lo que el editor no hubiera esperado nunca es que el joven dibujante desapareciera con la plata que había cobrado y destruyera las páginas que había logrado terminar del cuarto número de "Big Numbers"
Mejor dejemos que nos lo cuente él mismo desde un comentario publicado en la web de "The Comic Journal" y traducido por la siempre recomendable "Entrecomics".

“Lo recuerdo como algo muy divertido, en realidad. Pude follarme a un montón de chicas, gastar dinero y ser conducido alrededor de Londres en una limusina blanca Rolls-Royce (¡dos veces!). Estos son sólo unos de los pocos lujosos beneficios dispensados por Kevin Eastman, gracias a su crédito y amabilidad. Es cierto que Kevin tiene un gran corazón -sin sarcasmos.”
“Supongo que en último término debo disculparme públicamente ante él por retener y finalmente destruir el trabajo que él me pagó por hacer. Cierto, él nunca los compró “en propiedad”, y legalmente no tenía derecho a reclamarlo, pero aun así… éticamente hablando, debí habérselo entregado para que lo usase a su antojo, de acuerdo con nuestro contrato. (…). A riesgo de arruinar todo el misterio alrededor del suceso, contaré como recuerdo que sucedieron las cosas… tan breve y claramente como sea posible. Me pagaron 9.200 dólares para completar el número cuatro de Big Numbers."


“Vale, no se lo digáis a nadie, pero para ser sinceros, ni siquiera terminé el número -pero igualmente fui pagado por él. La razón por la que destruí las páginas fue porque no podría haber admitido que sólo había completado como la mitad del número cuando me despedí, a pesar de haber cobrado todos esos cheques. Amaba el dinero de Kevin, de vedad que sí.”

“Ya veis, nunca tuve intención de permanecer en el proyecto, simplemente me mantuve involucrado en él para ganar (a través del dinero de Eastman) cierta prominencia, en cuyo momento lo dejé de la manera que todos hemos oído. De esta manera, sin pruebas visibles del trabajo, siempre brillaría como una obra maestra en las mentes e imaginación de la gente. Sería vilipendiado por algunos y convertido en una especie de héroe por otros que que entienden o simpatizan con la “integridad artística” y toda esa mierda punk rock”

“Sí, soy un chico con cuernos. No hay una sola cosa que diga o haga que no esté pensada para obtener un resultado específico. Todos y cada uno de los rumores sobre mí fueron generados y manufacturados por mí y nadie más que yo. Por favor, permitid que me presente…”* Nota: "Please allow me to introduce myself..." Parafraseando a la primera línea de "Simpatía por el demonio" de los Stones

Vaya que es una manera de presentarse.
De todas maneras y evitando hacer juicios de valor sobre la conducta ética de Al Columbia queda claro que su obra debería figurar entre las mas interesantes de los últimos años. Alcanza con ver "The Biologic Show" que publicó Fantagraphics en 1994 o su último trabajo, "Pim & Francie: The Golden Bear Day.

octubre 16, 2009

"The Usual Gang of Idiots"

"El staff de MAD Magazine en uno de sus tantos viajes alrededor del mundo, cortesía de su director William Gaines (al fondo de todos, barba blanca y lentes). Todo comenzó en 1960 cuando Gaines invitó a todo su equipo a un viaje por Haití para conocer a su único suscriptor y convencerlo de que renovara por un año mas. A partir de ahi los viajes se volverían una costumbre y los miembros de Mad visitarían Europa, Asia, Sudamérica y Africa. Dando lugar a extrañas anécdotas que después se volcarían en la revista.
Cuando le preguntaban que papel era el que ejercía él en MAD, Gaines solía decir: "Mí equipo creó la revista, yo solo cree la atmósfera".

octubre 12, 2009

James Swinnerton

James Swinnerton (1875-1974).
Este autor, muchas veces eclipsado por la figura de Richard Felton Outcault (The Yellow Kid), fue decisivo a la hora de entender el cómic tal y como lo conocemos ahora.
A los 14 años huyó de su casa natal y viajó hasta San francisco. Hacia 1892 empezó a colaborar como ilustrador y caricaturista para el San Francisco Examiner de William Randolph Hearst. Bajo la tutela de Hearst, con el que forjaría una duradera amistad, Swinnerton publicaría una gran cantidad de trabajos en los que exploraría las posibilidades del nuevo arte. Asi llegarían: “Sam and his Laugh”, “Professor Nix”, “Little Katy and her Uncle”, “Mount Ararat”, “Mr. Batch”, “Mr. Jack”, “Little Jimmy”, “Canyon Kiddies”, “The Daydreams of Danny Dawes”, y “Rocky Mason, Government Marshall”. “The Little bears”, otra de sus tiras, fué pionera incluso antes que The Yellow Kid, en la utilización de viñetas y globos de diálogos y se convertiría en una de las primeras en utilizar personajes fijos. Little Jimmy a su vez sería la mas duradera y aparecería de forma ininterrumpida por 54 años.
Gracias a la popularidad de su trabajo, a los 27 años de edad, Jimmy (como era conocido entre sus allegados) era un joven de vida relajada que disfrutaba de las mujeres y del alcohol en la New York de principios de siglo. Como resultado de esto y luego de una serie de extrañas hemorragias los doctores le diagnosticaron tuberculosis y le pronosticaron una par de meses de vida. De regreso a California y cuando todo hacía prever su muerte, Swinnerton (aconsejado por un amigo) se sometió a una estricta dieta de huevos crudos que milagrosamente le salvó la vida y lo llevó a vivir casi hasta los cien años.
Cuenta la leyenda que desde aquel día, el rehabilitado Swin se sacaba el sombrero en señal de gratitud cada vez que veía una gallina. Believe it or Not!

octubre 09, 2009

Revista Fierro

Esté Sábado 10 de Octubre, con su número #36 en la calle, la revista "Fierro" cumple tres años en esta nueva etapa. Durante este tiempo pasaron por sus páginas desde los clásicos de la historieta nacional (Breccia, Mandrafina, Altuna, Gimenez, Muñoz, etc) hasta los mas talentosos autores de la nueva generación. Como parte de los festejos por estos tres años, desde este blog les presentamos los rostros de algunos de los muchos y grandes artistas que pasaron por la revista. Como siempre agradecemos a los retratados y a los fotógrafos por prestarnos sus imágenes para publicarlas en este blog.











Ernán Ciriani, T. Dassance y Juan Sáenz Valiente











Caro Chinaski


















Alejandra Lunik













Rodrigo Terranova, Frank Arbelo y F. Reggiani











Lucas varela, Pablo Túnica
Humberto Miranda y Gustavo Sala












Esteban Podetti, Diego parés y Lucas Nine












Gastón Souto, el Polaco Scalerandi, Parés y Tute












El Niño Rodriguez y Lucas Varela











Max Aguirre, Mandrafina y Angel Mosquito














Sala, Fede Pazos, Parés y Zweig.

octubre 05, 2009

Ernie Bushmiller y Otto Soglow

"Ball Point Bathing Suits", ese es el nombre de la sesión fotográfica que se llevara a cabo el 1 de Enero de 1950 y que reflejara la lente del fotógrafo Bernard Hoffman.

La idea es tan curiosa como sencilla: un numeroso grupo de "cartoonists", lapicera en mano, ilustran con sus personajes los trajes de baño de bellas y jóvenes modelos a las cuales luego procederán a mojar para comprobar la resistencia al agua de la tinta.
¿Precursores del bodypainting o de los concursos de camisetas mojadas? Tal vez ambas.

El tema es que en dicho evento podemos descubrir, y digo descubrir porque el fotógrafo no hace referencia a los fotografiados, a una serie de reconocidos dibujantes de la época. Entre ellos, dos de los que aparecen
en este post: Ernie Bushmiller, el creador de Nancy (Periquita) y Otto Soglow, el padre de The Little King (El rey petiso).
Ah… Los fabulosos años 50 mis amigos.
Quién pudiera…

Agradecimiento especial en este caso a Loris Z. por la foto y el dato.

octubre 02, 2009

Al Capp


Al Capp, el creador de Li'l Abner, posa despreocupado junto a un coro de atractivas rubias en bikini. Visto desde esta perspectiva tan frívola no es de extrañar que por esa misma época el autor que solía colaborar en el popular "Tonight show" de Johnny Carson, se enfrentara en un episodio televisivo con el mismísimo John Lennon y señora. Bueno, la verdad es que Yoko aporta bastante poco en la discusión. Capp, que llegó a ser propuesto por Charles Chaplin para el Nobel, nos brinda en este incidente una clase magistral de su irónico sentido del humor (un poco teñído de patético conservadurismo), pero humor al fin. Lennon que sospechamos ya sabía en lo que se había convertido trata de permanecer en su sitio (la cama) y enarbolar la bandera del amor libre y la no violencia. ¿Quién ganó en esta batalla dialéctica dirán ustedes? Saquen sus propias conclusiones: